sábado, 16 de abril de 2011

TAMAULIPAS ESTA DE PIE...

CON MUCHO GUSTO COMPARTO ESTE MODESTO ESPACIO DE EXPRESION PERSONAL, CON LA SIGUIENTE IDEA DE OSCAR LUEBBERT GUTIERREZ, DE MANIFESTAR QUE TAMAULIPAS ESTA DE PIE Y QUE LOS TAMAULIPECOS DEBEMOS ESTAR UNIDOS EN TORNO A NUESTRO GOBERNADOR, ANTE LOS EMBATES DE LA MALA FE O LA IGNORANCIA CENTRAL.

ESTO ES LO QUE SE DIJO EN "TERCER GRADO"

Y ESTA ES LA RESPUESTA DE OSCAR LUEBBERT GUTIERREZ:


Tamaulipas fallido?


-La política avestruz


Asumiendo que las opiniones vertidas en Tercer Grado el miércoles 13 del presente enfocan hacia Tamaulipas como un estado fallido, es conveniente complementarlas con estas reflexiones.


Fue política fallida la del gobernador Egidio Torre Cantú haber creído en la estrategia del mando único militarizado y como primer acto de gobierno haber hecho una alianza con el gobierno federal desde el presidente Calderón, la SEDENA, la SM y la SSPF?


Que responsabilidad tienen los funcionarios federales encargados de las áreas de la seguridad pública, si los eventos de San Fernando sucedieron en una carretera federal, cuya vigilancia está a cargo de la SSPF?


Que responsabilidad tienen García Luna y sus mandos en el estado de Tamaulipas sobre este lamentable hecho?


Que instituciones como el CISEN, el INM, la SSPF, la SEDENA y la PGR tuvieron información documental previa sobre esos incidentes, en que fechas y que hicieron al respecto?


Cuando, porqué y quién ordenó quitar el punto de revisión establecido desde hace décadas en el lugar conocido como El Tejon en la Y de la carretera a San Fernando, toda vez que es un punto logístico estratégico para el control de acceso a la frontera norte?


Política fallida es:


…El origen de la guerra, motivado para legitimarse en el poder y manipularla políticamente, contra gobiernos estatales y locales.


…La ausencia de coordinación efectiva de las instituciones federales claves en la estrategia, como PGR, SHCP, ADUANAS e INM.


…La evidente descoordinación de las fuerzas federales tanto de la SEDENA, MARINA y SSPF.


…El descalificar a estados y municipios, al señalarlos como los responsables de asuntos que son de estricta competencia federal en lugar, de apoyarlos y sumarlos.


…La ausencia evidente de servicios de inteligencia para la seguridad nacional.


…El hecho de que la federación no pueda reaccionar con oportunidad y eficacia en zonas conflictivas.


…Ha sido fallida nuestra relación con Estados Unidos en cuanto a que ellos no han reducido su dependencia a las drogas; no han evitado el tráfico de armas y no han logrado una reforma migratoria humanitaria, porque los sucesos lamentables de San Fernando, están vinculados con el trafico de personas.


En los sucesos de Tamaulipas, que responsabilidad tienen la SEDENA, la MARINA, la SSPF, la PGR, las ADUANAS, el INM y el CISEN. Son también ellos parte del estado fallido?


A que otras instituciones debemos señalar como corresponsables del estado fallido?

Atentamente


Oscar Luebbert Gutiérrez


Ciudadano Tamaulipeco

PD. ADICIONALMENTE, SE LES RECUERDA QUE EL TRANSPORTE DE PASAJEROS DONDE SE HAN LLEVADO A CABO LOS ASALTOS Y SECUESTROS, LLEVAN PLACAS Y SON CONCESIONARIOS DEL TRANSPORTE PUBLICO FEDERAL...

sábado, 9 de abril de 2011

Lo que es hablar claro...



El lenguaje llano que utiliza Humberto Moreira para poner al descubierto las verdades acerca del desequilibrio nacional causado por el mal gobierno que encabeza Felipe Calderón, hicieron mella en el PAN. Veamos por qué.


Lo que pasó, es que en medio del inusual contubernio PAN-PRD, llegó a la Presidencia del PRI un hombre sencillo en el hablar, efectivo en el hacer y desprovisto de la ambición de convertirse en candidato a presidente de la republica. Así de fácil.


Para nadie es secreto que el lenguaje de Moreira es ajeno a cartabones o moldes retóricos que confundan al que le oye. Por el contrario, todo aquel que lo ha escuchado no solamente percibe que las palabras que utiliza son de sencillez extrema, sino que también le entiende.


Para explicarlo mejor, diré que así como en los cafés de todo el país la gente común y corriente se queja sin freno de las graves consecuencias que sufre a causa de las aberraciones militarizantes de Felipe Calderón, así de sencillo habla Moreira.


Con las mismas palabras que las amas de casa usan para susurrar en medio de la libertad que les concede el patio de su vecindad, lo caro que se ha puesto todo, así habla el nuevo dirigente del PRI. Lo comprobamos cuando las tijeras de su sencillez hicieron trizas a sus iguales Madero y Ortega en la entrevista que les hizo Loret de Mola.


Ante tal escenario, la trascendencia mediática adquirida por las verdades expuestas con claridad popular por Moreira, provocó una contraofensiva panista exprés sin precedente en la que participaron desde el presidente del PAN, Secretarios de gabinete y hasta el propio presidente Calderón, quien tuvo que salir a defender nuevamente la guerra que nadie le pidió, desde la cubierta del “Cuauhtémoc”, que irónicamente el presidente priísta José López Portillo puso al servicio de la Marina en 1982 con la finalidad de forjar marinos de mar. No de calles, ni de carreteras.


Propio de la época retro que vivimos, resulta fácil comprender porque la sencillez de la oratoria popular que usa el presidente nacional del PRI, se ha puesto de moda y pone en jaque a la desgastada y complicada oratoria oficial de la federación conducida por los panistas creadores de los mitos del cambio y del empleo.


Panistas que lógicamente por su formación, cancelaron el civismo y el fomento a los valores morales de los programas educativos, hablándole a la nación en códigos cifrados con el doble propósito de llegar al poder y desde ahí, destruir la historia patria.


Ello explica aritméticamente, que los niños y jóvenes formados así desde hace 10 años, son ahora los NINIS, generación apátrida, desvalorizada, ignorante, pobre y finalmente orillada a la delincuencia.


Retomando la manera de hablar de Moreira, ojala el Secretario de Hacienda hablara tan sencillo como él cuando se hace bolas intentando explicarnos de qué sirve tener guardados 120 mil millones de dólares, mientras la mayoría de las familias del país se ahogan en la insolvencia económica individual.


Desearíamos que con el mismo lenguaje sencillo que usa el líder del PRI, la Secretaria de Turismo nos explique porque traiciona la tradición de su país, solamente para fastidiar al gobierno priísta de Acapulco, arrebatándole a todos los guerrerenses la sede del Tianguis turístico.


Cómo quisiéramos que alguien del gobierno federal panista tuviera el don de la palabra que tiene Moreira, para que nos explique porque quieren vender PEMEX y CFE a intereses internacionales, en vez de recurrir al disfraz de las recomendaciones de un presidente sudamericano.


La nación demanda explicaciones sencillas, por ejemplo: Si Calderón no escucha al pueblo… ¿podría al menos sustentar sus decisiones en información estratégica oportunamente producida por hombres y mujeres patriotas, que integren un servicio de inteligencia donde la traición a México no tenga cabida, como en los tiempos de Don Fernando Gutiérrez Barrios?


Demos gracias a que la oratoria fresca, claridosa y popular de Humberto Moreira, le ha devuelto a la nación la posibilidad de que el lenguaje sirva de una vez por todas para comunicarnos con claridad.


Ahora que la nación ha recordado que existe un lenguaje llano y sencillo, quizás pueda exigir como atributo elemental de los discursos de todos los partidos, candidatos y gobernantes, cero complejidades verbales.


Solamente alcanzando niveles de entendimiento mutuo que nos acerquen a la verdad, llegaremos a ser la nación que aspiramos heredar a los que nos siguen generacionalmente y una vez que nos vayamos entendiendo todos, poco a poco descubriremos quiénes son los amantes de México y quiénes son los que lo quieren vender con todo y subsuelo.


Visto así, el próximo presidente de la república deberá ser un patriota acompañado de un gabinete experimentado que hable con un lenguaje popular... como el que habla Moreira.

sábado, 2 de abril de 2011

NI cambio, NI empleo...

Las reacciones de los hombres en el poder, dan muestra de que los votantes no siempre acaban de conocerlos antes de emitir el sufragio. Las respuestas de Felipe Calderón son una evidencia de ello.


Como si la investidura presidencial fuera una prenda que pudiera quitarse y ponerse en función de su gusto personal o de la ocasión, el presidente de México se torna desesperadamente irónico cuando alguien le recuerda sus deberes olvidados a causa de la guerra que nadie le pidió.


Toda crítica a su olvido de los temas que no sean bélicos, por constructiva que sea, le molesta al presidente sencillamente porque encontró en el uniforme camuflageado de nuestras fuerzas armadas, el hoyo de escape más eficaz para evadir la triste, compleja y paupérrima realidad nacional.


Prefiere la comodidad de refugiarse en el tema castrense, no solo porque disuelve, esconde y difumina hasta volatilizar la impericia política y administrativa de su sexenio, sino porque también amordaza a la sociedad civil.


Y es que durante la etapa del cálculo de la reacción popular ante su decisión de destazar al país, el presidente Calderón habrá notado las altas probabilidades de silencio popular, gracias al respeto que aun inspira nuestro ejército mexicano. Por eso hoy, que alguien le recuerda que además de la guerra hay otros temas importantes, se enoja.


Tan inmensa como sus preferencias por los temas de su guerra y su sucesión, debe ser la bodega donde fueron a parar los estudios, análisis, proyectos, peticiones ciudadanas y hasta opiniones de intelectuales, inspiradas en temas como el empleo, la educación, la transferencia de tecnología, el fortalecimiento de la cultura, el fomento a los valores cívicos, desarrollo regional fronterizo, la atención a los deportados y demás rubros que a partir de decidirse por la guerra, poco o nada le significan.


La prioridad del presidente ha sido, desde que levanto la mano en San Lázaro en medio de vergonzantes empujones provocados por el PRD, mantener al PAN en Los Pinos. De ahí la guerra.


No sé a los demás, pero a mí me pareció que desde el momento que trastabillaba y se le dificultaba mantenerse erguido para que le fuera tomada la protesta, se veía que no tenía un equipo político experimentado con capacidad para negociar y lamentablemente para el país, en efecto, todo su desempeño ha sido mayoritariamente de escenarios de imposición y de resultados basados en la fuerza.


Hoy, cuando surge la voz del líder nacional del PRI y le solicita que se abra una mesa de diálogo donde se traten los asuntos nacionales que requieren atención inmediata debido a que nos la hemos pasado levantando casquillos y limpiando la sangre en calles, carreteras y escuelas, el presidente se indigna y en automático aflora en él, su proclividad a esconder en el pasado todo desorden actual, a pesar de que su partido el PAN, ya lleva diez años presidiendo la republica y dieciocho al frente de la procuración de justicia.


“Ellos tuvieron mucho tiempo…” dijo Calderón, refiriéndose de manera directa al PRI. Pero no dijo si le parecía importante o no la propuesta…


Como un niño al que se le intenta retirar de las manos un juguete con la finalidad de que lo comparta con sus hermanitos, el titular del ejecutivo federal reclama airado, que al PRI se le permitió estar en el poder por más tiempo.


Ante dicha respuesta, dos interrogantes. La primera es: cuanto es suficiente tiempo para que un presidente de la republica atienda o al menos se preocupe por todos los rubros socio político económico culturales? Y la segunda es: querrá Calderón que el PAN dure en el gobierno lo mismo que duro el PRI?


A eso me refiero cuando digo que hasta no ver las reacciones de los hombres en el poder, se conocen sus verdaderas intenciones. Antes, para Vicente Fox y Felipe Calderón, todo era cambio y empleo. Hoy, hoy, hoy para vergüenza del PAN, ambos presidentes resultaron NINIS, ni cambio, ni empleo.